¡Hola, me llamo Pecas! Soy un Dálmata muy hermoso, o por lo menos eso dice mi humano, él se llama Juan, es la persona más maravillosa del mundo, vivo con él desde que tengo memoria, no es mucho, a penas cumplí cinco años.
Recuerdo que cuando llegué a su vida era su cumpleaños, fui un regalo muy deseado, él ya estaba en busca de un mejor amigo y no es por nada, pero no pudo tener mejor compañía.
Todos los días nos levantábamos juntos, desayunábamos juntos, salíamos al parque, veíamos películas y nos divertíamos mucho. Claro que también él tenía que trabajar para pagar las croquetas, así que yo lo esperaba cómodamente en un sofá de la sala.
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Un día, hace un año, sentí que mi humano estaba a punto de llegar a casa, así que corrí hacia la puerta, pero mi olfato detectaba un aroma diferente, no venía solo. A los pocos minutos entró a nuestra casa y, en efecto, venía acompañado de otro ser peludo de cuatro patas, Juan me saludó como siempre y me presentó al nuevo miembro de la familia que había decidido adoptar, dijo que era ¡MI HERMANO!
Me quedé sorprendido, no supe qué hacer, solo me acerqué para olfatearlo y me fui a mi cama, no me sentía molesto, simplemente no tenia claro cómo sería mi vida con un “hermano”, siempre habíamos sido mi humano y yo solitos.
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Los primeros días fueron complicados, Bob, así se llama, no sabía el movimiento de la casa, tampoco en dónde debía hacer del baño, cuál era su lado de la cama ni cuál era su plato. Yo trataba de ser paciente, también Juan.
Pasaron semanas y yo todavía no estaba muy convencido, no me agradaba mucho la idea de compartir cosas con alguien que llegó de la nada.
En fin… fueron pasando los días y la convivencia con Bob fue mejorando, las salidas al parque eran más divertidas, podíamos jugar los dos y nos entendíamos muy bien, lo mejor de todo es que ya no pasaba tiempo solo en casa cuando nuestro humano se iba, las travesuras ahora eran en pareja.
Bob y yo llevamos un año siendo “hermanos”, todavía no sé el significado de la palabra, pero yo lo puedo describir como un compañero para toda la vida, alguien que es tu complice, que te ama y que te apoya siempre.
Mi vida ya no sería la misma sin él…
