Existen una serie de situaciones o acciones que a tu perro le molestan, algunas de ellas las puedes estar haciendo tú sin darte cuenta de que a tu mejor amigo no le agradan tato, otras pueden ser provocadas por factores externos.
Te dejamos una serie de cosas que pueden estresar a tu perro:
No poder saludar a otro perro: Los canes son fanáticos de acercarse a otros de su especie durante los paseos, quiere conocer y obtener toda su información posible. Algunos viven con humanos que no les gusta que se acerquen con otros perros y eso los puede desesperar un poco.
Comer solo croquetas: Aunque es el alimento que solo debe comer, puede resultar aburrido y tedioso comer todos los días lo mismo, afortunadamente existen alternativas que se pueden mezclar con las mismas croquetas.
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Sonidos fuertes: Los perros tienen el sentido del oido más desarrollados que los humanos, por eso a muchos les asustan los truenos, las sirenas, cuando se azota la puerta muy fuerte o con sonidos similares.
Abrazarlo: Algunos caninos no entienden este tipo de expresiones humanas de afecto y pueden confundirse, en especial si la persona que lo abraza es un extraño.
Que no lo dejen entrar a la casa: Si tu perrito está afuera mientras toda la familia está reunida y pasando un buen momento dentro de la casa, él puede sentirse triste e impotente por no poder hacer nada para ser parte del momento. Recuerda que él también es miembro de la familia.
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Pasar mucho tiempo solo: Los perrhijos no están adaptados biológicamente para estar solos más de cinco horas, si el tuyo está en esta situación, busca alternativas para disminuir el estrés.
Estar atado por mucho tiempo: Si bien hay situaciones en las que se requiere atar a nuestro pequeño, después de mucho tiempo puede desarrollar un estado de estrés, ansiedad, miedo y frustración cuando está sin libertad de movimiento y siempre en el mismo lugar.
Recuerda que tu perrhijo también es un ser vivo que siente, y que al igual que los humanos, les gusta hacer cosas libremente y nosotros debemos procurar dejar que las realicen, siempre y cuando no ponga en riesgo su salud ni su vida.
