La fidelidad de un Perrhijo no tiene límites, siempre nos cuidarán y estarán con nosotros incondicionalmente; un ejemplo es la historia del perrito Hachiko, conocido por esperar a su amado humano luego de 9 años de que falleció.
Hachiko fue adoptado Hidesaburo Ueno, profesor del Departamento de Agricultura en la universidad de Tokio. Se dice que su nombre, Hachi viene de una pequeña desviación en sus patitas delanteras; similar al Kanji que representa el número 8 en japones (八).
Acompañar a su humano a la estación de tren donde ambos se despedían y al final de la jornada, el perrito regresaba y lo recibía con mucho entusiasmo.
Sin embargo, fue el 21 de mayo de 1925 cuando el profesor falleció debido a una hemorragia cerebral. Es noche Hachiko no regresó a casa y se quedó a vivir en la estación de tren; donde era cuidado y alimentado por personas que eran testigos de como el adorable perrito acompañaba a su humano todos os días.
Su gran devoción hacia el profesor conmovió a todos, tanto que en 1934 levantaron una estatua en su honor en la estación de Shibuya, el perrito estuvo presente cuando fue inaugurada.
Hachiko cruzó el arcoíris el 8 de marzo de 1935, tras esperar a su amado humano por casi 10 años, pasando a la historia como uno de los Perritos más famosos de la historia.
¿Qué raza era Hachiko?
El adorable perrito Hachiko fue un Akita Inu, una raza de origen japonés, de gran tamaño y un porte imponente. Se cree que fueron criados para la caza del jabalí, ciervos y osos negros.
Son perritos fieles a su familia, tal es el caso de hachi y son muy valientes, aunque no ladran mucho siempre están alerta al cuidado de sus humanos.
Los akita necesitan mucho ejercicio y actividad, necesitan un paseo de mínimo una o dos horas diarias. Su pelaje es grueso, por lo que es recomendable cepillarlo dos o tres veces por semana para mantener un pelito en buenas condiciones.
Sin duda, el mundo esta llenó de Hachikos