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Orejón un perro al cuidado de varios vecinos de un barrio en Buenos Aires, Argentina, estaba paseando con uno de sus dueños. Al pasar por una casa, el perrhijo comenzó a ladrarle a una bolsa, al entender la insistencia del animal, el vecino se detuvo a revisar y resultó que en el interior había un bebé de 28 días al que llamaron, provisionalmente, Mateo.
Qué pena da el saber que aún hay personas sin corazón a quienes no les importó abandonar al bebé, a pesar del frío de 5 grados centígrados que se sentía en la ciudad. Afortunadamente el bebé está bien y se investiga el paradero de los padres del pequeño quien gracias a Orejón, sigue con vida.
Puedes ver más de esta historia en el siguiente video realizado por una televisora local.