Cargar a los perros es un error común entre los humanos, principalmente para demostrarles cariño o bien, como un acto de protección.
Recordemos que los perrhijos tienen necesidades que cubrir y este tipo de acciones humanas pueden llegar a limitarlas y, sin intención de hacerlo, los dueños pueden perjudicar a sus mejores amigos.
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¿Cuáles son las consecuencias de cargar a los perros?
Socialización: No importa si tu pequeño perrhijo está frente a otro más grande, es importante permitirle socializar con las debidas precauciones para evitar que con el tiempo se vuelva agresivo o tímido.
Entrenamiento: Para que los perros sean educados y aprendan a hacer cosas nuevas es indispensable que estén en un estado de libertad para poderles poner límites, de lo contrario, si están acostumbrados a la sobreprotección de los brazos, al soltarlos pueden echarse correr.
Desarrollo: Los canes tienen la necesidad experimentar cada rincón del lugar en el que se centran para obtener información y si los están cargando se sienten limitados para desarrollarse en el entorno.
Miedo: Una acción frecuente es cargar a los perrhijos cuando están asustados para tranquilizarlos, pero en lugar de ayudar solo aumenta la sensación de temor.
Costumbre: Si los perros crecen estando en los brazos de sus dueños la mayor parte del tiempo, será fácil que se acostumbren y en un futuro pueden volverse miedosos, dependientes e inseguros.
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¿En algunos casos sí es correcto cargar a los perros?
Puede haber momentos en los que sea necesario cargar a los perros, por ejemplo:
- Después de una cirugía.
- Si no pueden socializar por enfermedad o lesiones.
- Al estar en un lugar con mucha gente.
Es importante que al cargarlos tengan un buen soporte en la espalda y sostener sus patas traseras con las manos evitando que quede colgando alguna parte de sus cuerpo.
¿Tú cargas a tu perro constantemente?